AMOR VERDADERO

Lo tengo comprobado : siempre que saco el tema produce miradas de incredulidad cuando no carcajadas... La pregunta detonante de estas reacciones es “¿crees en el Amor Verdadero?”. Lamentablemente la respuesta es casi unánimemente negativa, lo que me hace pensar que vivimos en una sociedad muy pesimista.

Los “encuestados” me dicen que sí que creen en el amor, pero lo suelen definir como un sentimiento subjetivo, no racional, y por lo tanto probablemente pasajero.... o al menos no son capaces de darme una sola razón para que no sea así. Esto me lo dicen con voz resignada y sin ninguna alegría, lo cual me da esperanzas : como mínimo no se jactan de este triste pensamiento.

En mi opinión no les faltan motivos para pensar así : ¿quién habla hoy del Amor?, ¿Quién da motivos para Amar la Vida y a las personas?. En un mundo donde impera el Relativismo Emocional decir “te quiero” significa añadir “de momento..., mientras nada cambie o yo no cambie de opinión o sentimientos”. Es triste.

Creo que parte de culpa la tienen las películas románticas (y antes las novelas del mismo género) que han presentado un concepto de Amor caprichoso, sometido a la pasión y desvinculado totalmente de valores como el esfuerzo, la renuncia y el sacrificio. Todo esto ha encontrado su máximo exponente en la cultura materialista y consumista en la que vivimos en la actualidad, dónde se equipara instintivamente a las personas con objetos de consumo.

Por otro lado no existe ninguna Multinacional que venda un producto llamado Amor, ya que Amar es gratis y ocasiona perdidas : lo entregamos todo a cambio de nada. No se hacen anuncios en la tele ni se distribuye correo comercial vendiendo Amor.

Y es que el Amor Verdadero es un producto difícil de colocar en el mercado. Amar causa dolor. Hay que morir un poquito (o mucho) por el ser amado para saber si realmente lo amamos. El Amor tiene algo de sentimiento (¡faltaría más!), pero tiene mucho más de convicción.

Basar una relación –la que sea- en un concepto erróneo e inmaduro del Amor nos sitúa en una posición de riesgo con duras consecuencias emocionales. Amar puede ser muy divertido pero no deja de ser una cosa muy seria...