Esta semana he tenido una gran alegría: me he reencontrado con un amigo al que hacia mucho tiempo que no veía. Esto me ha hecho pensar en lo dificil que es hoy en dia hacer amistades auténticas.
Normalmente no nos paramos a pensar en lo importante que es la amistad en nuestras vidas. Y luego esta el peligro de confundir la amistad con otras cosas: la casualidad de ser compañeros de pupitre en la infancia, la conveniencia se salir en grupo durante la adolescencia, el coleguismo con los compañeros de profesión, cuando no la simple conveniencia por algun interés personal.
Todo esto pueden ser "ocasiones" para hacer amistades pero no son amistad. La amistad es un ejercicio de libertad: soy amigo tuyo porque quiero. Y por eso no podemos hacer depender la amistad de cuestiones temporales (la falta de tiempo, el exceso de trabajo...). Para un amigo esto son excusas baratas...
2 comentarios:
Es difícil, yo ahora me encuentro en una encrucijada. Mis amigos de la infancia-adolescencia, los que a fuerza de convivencia hemos vivido muchas cosas, pues no son cristianos... Y eso dificulta las cosas por temas escabrosos como conversaciones sobre sexo, tacos en las conversaciones o blasfemias (y cuando les dices que por favor no blasfemen no te hacen caso), a parte de que las conversaciones que tienes con ellos son sobre cosas del mundo, y lo que gustaría es hablar sobre las cosas del Señor. Pero no quiero dejar su amistad porque son mis amigos más antiguos, de la infancia adolescencia y hemos pasado mucho tiempo juntos. Es difícil.
Bueno, seguro que si les dices que no hablen delante de ti de ciertos temas y se lo explicas, seguro que te respetan...al fin y al cabo son tus amigos.
Ahora bien, eso de hablarles de religión es mas complicado. Quizas sea mejor que vean a JC a través de ti, de tu ejemplo, y de tu amistad....seguro que vuestra amistad tiene un significado mas profundo...
Saludos!!!
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